El confinamiento ha sido un momento duro para muchas personas víctimas de violencia de género y muchos recursos se desarrollaron para ayudarlas. También muchas investigaciones están sacando a la luz la realidad que han vivido.
Este artículo, Locked down? Speaking from the shadows and silence for survival, recoge el testimonio del silencio y el sufrimiento de las supervivientes de los abusos domésticos en los tribunales de familia de Inglaterra y Gales y de la lucha por encontrar una voz que sea el altavoz que recoge las dificultades a las que se enfrentan, por la situación que sufren y el bloqueo a través de los tribunales.
La autora cuenta una experiencia directa, cómo la vivió, y cómo se sintió, tanto por sufrir violencia durante el confinamiento como por denunciarlo, y la experiencia que vivió en los tribunales y luchar para que su voz sea escuchada. Este artículo, es un vistazo a un mundo que está oculto para muchas personas, y donde se pretende que una experiencia personal inspire a otras personas a luchar contra una realidad. Las narrativas de algunas realidades se convierten muchas veces en motor de cambio, ayudan a personas a movilizarse contra una injusticia, y aportan apoyo para las más vulnerables. Empoderando a las víctimas en este caso, superando su silencio y sobre todo su aislamiento.
Afirma la autora de este artículo, publicado en esta prestigiosa revista, que el maltrato doméstico y el tabú que lo rodea hace que este tema sea necesario ser sacado a la luz, dejar de ser escondido e invisible. Describe que el coste real de no nombrar la violencia, hace que a veces hagan falta palabras para explicar los hechos, y transmitir la idea de la necesidad del apoyo que requieren las personas en esta situación. Por el otro lado, el estudio relata la cruda realidad de enfrentarse como víctima al sistema judicial; ya que muchas veces ese es un espacio donde la voz de las supervivientes no es escuchada, como en este caso, un tribunal de derecho de familia y que minimizó y trató de marginar un testimonio durante los tres años de recorrido judicial que se describen, con los efectos que esto ha tenido.
Este tipo de investigaciones, basadas en las narrativas, demuestran tener impacto en crear concienciación sobre una realidad, a la vez que incrementar la movilización y el apoyo a la víctima.
