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Según la Organización Mundial de la Salud, el rostro de las personas que están en primera línea sanitaria frente a la COVID-19 son mujeres. En el caso de Europa, el 84% de las enfermeras y el 53% de médicas son mujeres. El secretario regional de la OMS en Europa aprovecha el 8 de marzo para destacar los problemas que afectan a las mujeres y uno de los sectores laborales más importantes de mujeres, a nivel mundial y regional: la fuerza laboral de la salud y la asistencia social. 

Según apunta, hace cinco semanas, de los 1.3 millones de trabajadores y trabajadoras de la salud que habían sido infectados de COVID-19, el 68% eran mujeres. Es por esto por lo que desde la OMS se hace un llamado a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para proteger nuestra primera línea.

La tensión continua en los hospitales y personal sanitario se enfrenta con actos de solidaridad médica entre la comunidad europea. Lo que es importante potenciar y mantener para proteger a las personas que siguen al frente y conseguir transformar la situación.

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