Hace mucho que las clases magistrales han quedado obsoletas, aunque muchas universidades recurren a este tipo de métodos para enseñar al alumnado. En los tiempos que corren, en los que la obligación del confinamiento ha dificultado continuar con las clases presenciales, se ha podido observar que no toda la docencia tienen una formación adecuada para seguir impartiendo clase online o utilizando aplicaciones que facilitan esta conexión con el alumnado. Ni qué decir de la brecha que se ha abierto para el alumnado en situación de vulnerabilidad tecnológica que no dispone de internet u ordenadores.
En el artículo Re-imagining the future of education in the era of the fourth industrial revolution [Reimaginando el futuro de la educación en la era de la cuarta revolución industrial] se hace hincapié en cómo la educación superior ha ido siendo sujeto de innovación, objeto de políticas varias a nivel mundial para tener un impacto en la sociedad. Los equipos investigadores proponen observar qué impacto ha tenido, está teniendo y tendrá la que denominan Cuarta Revolución Industrial en la educación en general. El artículo recoge información sobre qué tipo de preparación se necesita para afrontar exitosamente dicha revolución.
Según la investigación realizada, después de consultar a expertos y hacer una revisión de la literatura existente, se necesitaría 1) modificar el plan de estudios; 2) adoptar la tecnología adecuada para llevar a cabo actividades presenciales y online, y 3) la proyección de otras técnicas y habilidades de aprendizaje como trabajar en la nube, inteligencia artificial, ciberseguridad entre otras, que no se han tenido en cuenta.
Para que la educación vaya a la misma velocidad que los cambios que exige la nueva revolución, se necesita que vayamos hacía esta mejora de manera dinámica, incluyendo en los currículos otros conocimientos que sí que utilizamos en el día a día, pero no en el aula, sobre la inteligencia artificial, la ciberseguridad, las impresoras tridimensionales, los automóviles sin conductor y la robótica. Aprender de manera transformadora es lo que nos dará la llave al éxito para que el desarrollo tecnológico expanda el impacto social a todas las áreas de conocimiento para toda la sociedad, sin dejar a nadie atrás.
