Este artículo, publicado recientemente en la revista “Frontiers in Psychology” bajo el título Social Impact of Psychological Research on Well-Being Shared in Social Media, pretende demostrar cómo la metodología de Social Impact in Social Media (Impacto Social en las Redes Sociales) proporciona evidencia sobre la visibilidad del impacto social de la investigación cuando es aplicada a la investigación en el área de la psicología.
El artículo ayuda a las y los investigadores a darse cuenta de si sus mejoras están captando el interés de la ciudadanía y de qué manera. En la misma línea, las autoras y el autor observan cómo la población está aplicando dicha evidencia y obteniendo mejores resultados, en este caso en relación con el bienestar, teniendo en cuenta un impacto directo en la salud de las personas. El bienestar se ha tenido en cuenta desde la perspectiva psicológica que está en línea con uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible – ODS3: garantizar vidas saludables y promover el bienestar para todas las personas, promovido por la Organización Mundial de la Salud.
Para el artículo se analizaron 10 estudios de caso sobre el bienestar que fueron seleccionados utilizando los criterios siguientes: 1) elección de 10 proyectos de investigación competitivos (8 del programa marco y 2 investigaciones de universidades de Estados Unidos sobre bienestar que muestran públicamente sus datos en las redes sociales. 2) El período de selección de los datos de las redes sociales: desde el momento en que se publicó el primer mensaje y los datos estuvieron disponibles en su perfil hasta agosto de 2019. 3) Los datos de las redes sociales recopilados son de Twitter y páginas de Facebook con publicaciones públicas. Además, los criterios cumplían el hecho de que sus resultados condujeron a una mejora demostrable en el bienestar y que estas mejoras se hayan presentado en las redes sociales. Esta metodología también es útil para las agencias que apoyan a la investigación en psicología con asistencia financiera, que pueden usarla para evaluar el impacto social de los fondos que invierten en investigación.
Para los resultados del estudio se aplicó el índice de cobertura de impacto social para identificar el porcentaje del impacto social compartido en las redes sociales en relación con la cantidad total de datos de redes sociales recopilados. El artículo también presenta ejemplos de evidencia cuantitativa y cualitativa del impacto social de la investigación sobre el bienestar, como por ejemplo, el Harvard Study of Adult Development, que proporcionó numerosos datos sobre el bienestar de las personas basado en relaciones de calidad. Otro ejemplo es el Proyecto LIFEBRAIN, financiado por el programa H2020 de la Comisión Europea, que demuestra cómo las interacciones sociales e intelectuales con sentido mejoran la salud del cerebro.
Además, se demuestra cómo los ciudadanía pueden acceder a la última evidencia en las redes sociales y actuar como canales de comunicación entre la ciencia y las redes sociales o personales y, al hacerlo, mejorar las condiciones de vida de las demás personas.
