La Convención sobre las armas biológicas, el primer tratado multilateral que prohíbe toda una categoría de armas de destrucción masiva celebra su 50º aniversario. Junto con las Misiones Permanentes ante las Naciones Unidas de Australia, Panamá, Filipinas y Suecia, así como UNIDIR, se ha organizado una exposición para destacar el papel indispensable de las mujeres en la construcción de la Convención sobre las armas biológicas. El 28 de noviembre, los representantes de los organizadores inauguraron oficialmente la exposición en el Palacio de las Naciones en Ginebra.
Las mujeres exhibidas en la exposición se convirtieron en modelos a seguir para las futuras generaciones de diplomáticas, científicas, y académicas que aspiran a trabajar en el campo de las armas biológicas, lo que demuestra que una carrera en este sector específico y altamente técnico es imaginable y alcanzable.
Al mirar hacia atrás a los últimos cincuenta años de la Convención sobre las armas biológicas, es importante reconocer que las mujeres siempre han estado a la vanguardia de los esfuerzos para rechazar las armas biológicas y promover los usos pacíficos de las ciencias de la vida, que siguen siendo una parte muy importante del ecosistema que sustenta esta Convención, y que también desempeñan un papel importante en la promoción de los objetivos de la Convención sobre las armas biológicas en el futuro. La exposición presenta a mujeres que participaron en la redacción y negociación de la Convención sobre las armas biológicas, mujeres que están a la vanguardia de mantener el mundo a salvo y protegido de las armas biológicas, al tiempo que promueven los usos pacíficos de la biología, y mujeres jóvenes prometedoras que están siguiendo carreras en las ciencias de la vida.
Coordinadora del Metoo University