ENAR es una red de lucha contra el racismo, creada en 1998 por activistas de base, con el objetivo de conseguir cambios legales a nivel europeo en el progreso hacia la igualdad racial en todos los Estados miembros, a través del impulso y promoción de la igualdad racial y la colaboración entre los actores de la sociedad civil.
En su visión de una Europa donde haya plena igualdad, solidaridad y bienestar para todas y todos los ciudadanos y residentes, esta organización pretende acabar con el racismo estructural en la Unión Europea transformando esas estructuras e instituciones a través de la promoción de actitudes basadas en la igualdad y la distribución equitativa de poder, privilegios y derechos. Para ello, ENAR entiende que es necesario comenzar por eliminar cualquier trato discriminatorio contra las personas por su color de piel, religión, cultura, etnia o nacionalidad que pueda restar oportunidades de empleo y/o de acceso a la salud, vivienda, educación y servicios, así como cualquier manifestación de violencia física y verbal por motivos raciales contra migrantes y las minorías étnicas y religiosas.
Entendiendo que políticas y barreras estructurales van unidas y que, sólo cambiando las primeras se favorece que las segundas caigan y se generen oportunidades para que migrantes y minorías étnicas y religiosas puedan participar plenamente en la sociedad, ENAR lanzaba una demanda dirigida a las y los candidatos de las elecciones al Parlamento Europeo que ayer mismo se celebraban. Son Diez acciones a través de las cuales la Red les pide que hagan frente a las desigualdades estructurales experimentadas por las minorías:
- Denunciar la violencia racista y toda forma de odio.
- Promover discursos positivos sobre las minorías en Europa.
- Adoptar políticas fuertes y comprehensivas para combatir el racismo estructural.
- Medir el progreso hacia la igualdad.
- Terminar con la discriminación y la violencia estatal.
- Terminar con la discriminación, la criminalización, y la exclusión de todos los migrantes.
- Promover la memoria y reparación de historiales de esclavitud y colonialismo.
- Garantizar una política europea diversa y representativa.
- Apoyar a la sociedad civil para combatir la injusticia y la desigualdad.
- Restablecer un fuerte intergrupo parlamentario para el antirracismo y la diversidad.
A partir de hoy podremos comenzar a comprobar si los políticos y políticas elegidas por los y las ciudadanas europeas hacen caso omiso o toman en consideración cada una de estas 10 peticiones en pro de una Europa más igualitaria y garante de oportunidades para todas y todos sin excepción, cohesionada al mismo tiempo que libre y justa pasa por incluir en igualdad de oportunidades todos los talentos y capacidades. El capital y la inteligencia cultural de las diferentes comunidades nos enriquece y beneficia a todas las personas que formamos parte del tejido social.
