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La violencia, en todas sus formas, sigue siendo uno de los problemas más urgentes en nuestra sociedad. Sin embargo, hay espacios donde el compromiso colectivo y la acción concreta están marcando la diferencia. Un claro ejemplo de ello es el grupo de investigación CREA, que recientemente ha dado un paso adelante con la publicación del Documento vivo de Orientaciones para la prevención de situaciones de violencia, una herramienta clave para avanzar hacia un entorno académico completamente libre de violencia.
 
Este grupo de investigación ha obtenido reconocimiento por parte de prestigiosas instituciones académicas internacionales, y no es una coincidencia. El grupo CREA ha tomado una actitud valiente y activa, enfrentando la violencia como un problema que necesita atención rápida y medidas claras. La creación de su Comisión Violencia 0 y el desarrollo de orientaciones claras y específicas demuestran que un cambio de cultura organizativa profundo es posible cuando hay voluntad y compromiso.
 
El documento no solo establece directrices para prevenir y abordar situaciones de violencia, sino que también promueve una cultura de respeto y apoyo mutuo. Entre los puntos destacados, se incluyen:
 
1. Nadie debe ser presionado para guardar silencio sobre situaciones que considera maltrato, porque hablar es el primer paso hacia la solución.
2. La colaboración con quienes permanecen pasivos ante la violencia queda excluida, promoviendo así un entorno de valentía y solidaridad.
3. Las críticas, especialmente hacia alumnado en formación, deben ser siempre constructivas, orientadas a la mejora y basadas en el respeto mutuo.
4. Ante cualquier situación de daño, se debe asumir la responsabilidad, reparar las consecuencias en la medida de lo posible y comprometerse a rectificar en el futuro.
 
Estos principios reflejan una ética profundamente arraigada en el respeto a la dignidad humana y el avance hacia una convivencia libre de violencia.
 
El grupo CREA no solo está cambiando su entorno, sino que también está influyendo en otros lugares, siendo una inspiración para quienes buscan espacios seguros y justos en el ámbito académico.
 
Todas las personas tenemos un papel que cumplir en la erradicación de la violencia. Desde informar situaciones de violencia hasta construir espacios de diálogo y respeto, cada acción cuenta. La Comisión Violencia 0 demuestra que es posible avanzar hacia un entorno donde la violencia no tenga cabida.
 
La lucha contra la violencia exige valentía, cooperación y un compromiso inquebrantable, porque la construcción de un mundo libre de violencia comienza con cada acción y decisión que tomamos.

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Secciones: Violencia 0

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