El Barça femenino venció (0-2) al Chelsea este sábado en el Stamford Bridge de Londres para lograr llegar a la final de la Liga de Campeones que acogerá Bilbao el 25 de mayo. Esta será su cuarta final de la Liga de Campeones consecutiva y la quinta en seis años de un equipo histórico que busca revalidar la corona de campeonas de Europa.
Aitana Bonmatí inauguró el marcador en el primer tiempo (minuto 25) y el Chelsea no supo aprovechar sus ocasiones ni tampoco una buena reanudación después del descanso y se quedó con una jugadora menos en el minuto 59 por dos amarillas casi seguidas de Kadeisha Buchanan.
Después de la expulsión, el Barça recuperó el mando pero faltó paciencia para encontrar el hueco en la zaga rival. Las locales se juntaron más atrás, Salma no tuvo su día fallando una muy clara de cabeza, pero de nuevo Guijarro repartió juego y Aitana Bonmatí se coló entre las defensas provocando un penalti en el minuto 72. Rolfö tuvo un papel clave marcando el penalti y certificando el billete a la final de San Mamés. Si el equipo culé ganara la final, sería su tercera corona en los últimos cuatro años.
