En las últimas semanas han proliferado las noticias del uso de la inteligencia artificial para acosar, tanto por parte de agresores adultos como menores. Desde la creación de falsos desnudos, como la representación de abusos sexuales a menores.
Personas expertas en la materia, como diversas organizaciones de la sociedad civil están promoviendo un alto en el uso de la IA para acosar tanto a chicas como a menores. Cuando el uso de los adelantos tecnológicos son utilizados para reproducir la violencia, pervierten en si mismo su propio uso, y además promueven un mayor retroceso.
El uso acosador proviene de agresores no de la IA misma, quien usa la IA para acosar, adoptan un papel ridículo y cobarde, reproducen una violencia que los sitúan en los albores más retrógrados de la historia.
Aún así es necesario que diferentes agentes de la sociedad puedan frenar dicho uso, aplicando las recomendaciones éticas correspondientes, pero sobre todo ridiculizando a quienes así lo usan, pues hasta la fecha según las evidencias científicas no hay manera más efectiva que vaciar de atractivo dicha violencia.
