En fechas veraniegas en que florecen festivales de música, surgen iniciativas dirigidas a asegurar que estos espacios de ocio sean seguros para las mujeres y a establecer medidas para ello. Se trata de festival en el oeste de Francia de música heavy metal Hellfest que, con el objetivo de querer preservar el buen ambiente que caracteriza el festival, ha puesto en marcha el sistema “Hellwatch” para la prevención de la violencia sexual y sexista.
La iniciativa se viene trabajando desde la edición de 2019 en que recibieron diversas denuncias de acoso sexual. La respuesta a estas denuncias es “Hellwatch” dirigido a actuar frente al abuso y apoyar a las víctimas. Para ello, cuenta con un equipo de 60 personas voluntarias, 30 para cada uno de los dos fines de semana del evento. Su misión es supervisar la aplicación Safer, que puede hacer uso tanto víctimas como testigos para denunciar en tiempo real cualquier comportamiento, acoso o agresión de carácter sexual o sexista, con el fin de movilizar rápidamente al equipo de la organización. De esta forma, el equipo de personas voluntarias se compromete a actuar, ayudar a la gente a sentirse segura y evitar que haya conductas dañinas en el festival.
Otra de las medidas promovidas desde la organización del festival es la formación de todo el equipo de empleados contratados de manera periódica por el festival sobre esta temática. Aunque, la medida que más destaca la organización de Hellwatch es la promoción de una actitud proactiva entre las personas asistentes, lo que llaman ser un Hellbangers. Para ello buscan implicar a todas las personas en contribuir a que el festival sea un espacio seguro, apuntando la obligación de informar a los equipo de Hellwatch o Seguridad si se es testigo de algún comportamiento inapropiado. En definitiva, medidas que avalan los estudios por su efectividad al buscar el compromiso comunitario para asegurar un ambiente en el que prime intervenir siempre y proteger a quien sufre cualquier tipo de agresión.
