Tenemos entendido desde las aulas, en general, que el éxito empresarial viene de la mano de beneficios millonarios. Se nos enseñan estrategias económicas y empresariales para lograr ese éxito, sin pensar en ser responsables socialmente. Hay mucha información en los medios que aclaman por un lado y critican por el otro a gigantes empresariales que, deslocalizando algunos de los procesos productivos, explotando laboralmente y aprovechándose de legislaciones precarias en derechos laborales de países en vías de desarrollo, consiguen unos beneficios económicos extraordinarios. Pero, ¿es posible un mundo laboral diferente? ¿Es posible que el éxito empresarial sea sinónimo de solidaridad, humanidad y diálogo?
El artículo The Mondragon Case: Companies Addressing Social Impact and Dialogic Methodologies, publicado en la revista científica “International Journal of Qualitative Methods”, describe el caso de Mondragón como ejemplo de cooperativa que, siguiendo el modelo dialógico, consigue tener un impacto social sin dejar de ser competitiva.
Tal y como se indica en el estudio, en Mondragón siempre han trabajado bajo el lema “humanidad en el trabajo” y, siguiendo estos valores, la empresa ha continuado siendo competitiva en el mercado laboral. Por ello, el equipo investigador ha analizado las claves del éxito de Mondragón para poderlo trasladar a otros contextos. Con base a la metodología comunicativa, las Actuaciones Cooperativas de Éxito se centran en cinco ítems para conseguir el impacto social y empresarial: 1) Una empresa bancaria para conectar a todas las cooperativas, 2) Inversión de los beneficios y orientación humanista de la gestión, 3) Debate intelectual abierto, 4) Democracia de base y 5) Un sistema de seguridad social.
El ejemplo de Mondragón y las Actuaciones Cooperativas de Éxito son evidencia de que obtener éxito empresarial y tener impacto social, solidaridad y humanidad no son excluyentes. Se puede contribuir a la economía, superando la exclusión social y teniendo un crecimiento económico, creando trabajo con valores humanos, empleos decentes, mejorando así la calidad de vida de la sociedad.
Cuando nos basamos en evidencias científicas, aun a contracorriente de lo que en otros lugares se hace, con unos valores claros de humanidad, diálogo y solidaridad, el impacto social deja una huella a largo plazo, abriendo los horizontes para que todas las personas tengamos un ejemplo a seguir que beneficia a toda la sociedad.
