Series como EastEnders han marcado desde hace 35 años la programación de las tardes en la mayoría de los hogares del Reino Unido. Personas de la audiencia afirman en Independent que telenovelas como la dicha son parte de su infancia, desde los años noventa, lo que configura una socialización basada en las imágenes e impresiones sobre los sucesos de la serie. Hoy muchos y muchas de las que han seguido la telenovela exponen el elevado nivel de violencia de las imágenes y del contenido, basándose en violencia doméstica, abuso sexual, etc.

La creación de los primeros recuerdos de la infancia con imágenes de violencia configura el imaginario a lo largo de la vida, así como la normalización de unos actos gravemente perjudiciales a nivel colectivo e individual. EastEnders siempre ha normalizado la tensión y la violencia extrema, transmitida hasta cuatro veces por semana desde 1985. A pesar de eso, a menudo se la considera un entretenimiento familiar o una instantánea de la realidad que solo podría ser aterrador si se negara. 

El hecho de que EastEnders simplemente refleje la realidad ha sido durante mucho tiempo la defensa de la BBC cada vez que su barbarie se ha puesto bajo el microscopio. En 2002, uno de los episodios de la telenovela que incluía violación fue elogiada por su representación realista de la violencia doméstica. Pero también obtuvo cientos de quejas, y la Comisión de Normas de Radiodifusión declaró que el programa había ido “demasiado lejos” sin especificar. En 2008 se repitió el problema y se volvió a recurrir a la BBC, quien traslada la responsabilidad a la propia telenovela. Por el momento se ha justificado la violencia de la serie en un ejercicio entre lo real y lo irreal.

A pesar de las responsabilidades de la empresa, lo importante en este caso es y ha sido la normalización de la violencia de muchas generaciones a partir de telenovelas en muchos países, lo que abre debates sobre la atracción masiva por este tipo de contenidos y las consecuencias que los mismos tienen en las vidas de las personas y de la sociedad. 

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