La Internet Watch Foundation (IWF) ha publicado su informe donde incluye que ha respondido a más de 37.000 informes de abuso sexual infantil en línea en 2019, la mayoría implicando a niñas preadolescentes de 11 a 13 años. El delito sexual está creciendo en cuanto que los abusadores coaccionan a las niñas para que se graben desnudas o realicen actos sexuales ante las cámaras web de sus ordenadores.
Las imágenes son producto de una coacción y deben denunciarse. El “abuso del selfie” representa un tercio del material que IWF ha recibido para eliminar e implica situaciones que precisan prevención, trato y actuación urgentes.
Si hay personas que encuentran material de este tipo en línea, la IWF recomienda que informen y denuncien, puesto que es un asunto urgente; hay que recordar que es ilegal compartir o poseer imágenes explícitas de menores de 18 años en Reino Unido.
