El Instituto Nacional de Estadística acaba de publicar el último informe de Estadística de Violencia Doméstica y Violencia de Género (EVDVG) correspondiente al año 2018, y con datos de todo el territorio español. Las cifras muestran un notable y triste incremento del 7,9% de mujeres víctimas de violencia de género y un 6,9% más de víctimas (mujeres y hombres) de violencia doméstica. Además, este año pasado se han registrado 35.882 mujeres víctimas de ambas violencias (de género y doméstica). Un año más, se produce este aumento de violencia machista, manteniendo un incremento sostenido de casos desde el año 2014.
Para conocer más, se publican datos que concretan las informaciones. Así, según recoge Europa Press, la edad media de la mujer víctima de violencia de género es de 36,5 años, si bien se resalta que el mayor incremento lo representan las mujeres de entre 60 y 64 años y las jóvenes de 18 a 19 años.
Por comunidades autónomas, Andalucía lidera el número de víctimas (7.047, casi el 20% del total), seguidas por la Comunidad Valenciana (4.794) y la Comunidad de Madrid (3.656). Navarra, Ceuta y Melilla registraron el año pasado el menor número de víctimas. Además, en estas dos ciudades autónomas, se registraron los mayores descensos de casos de violencia de género respecto al año anterior, Melilla con un 16,2% menos y Ceuta con un 12,2% menos.
Todos los datos tratados se han tomado del Registro Central para la Protección de las Víctimas de la Violencia Doméstica y de Género, del Ministerio de Justicia, y se refieren tanto a asuntos incoados (con órdenes de protección o medidas cautelares dictadas) como a sentencias firmes en casos de ambos tipos de violencia. De los delitos atendidos, más de la mitad son relativos a lesiones (50,4%), y les siguen los de torturas y otros delitos contra la integridad moral (19,1%) y amenazas (16,9%).
La mayoría de las medidas cautelares fueron de carácter penal, especialmente órdenes de alejamiento, prohibición de comunicarse y la libertad provisional. Entre las medidas de carácter civil destacan las relativas al régimen de prestación de alimentos, de custodia y de visitas.
Las sentencias firmes que se dictaron en 2018, tanto por violencia machista como por violencia doméstica, fueron 34.696, un 5,7% más respecto a las de 2017. Más de la mitad de las sentencias fueron penas privativas de libertad y condenas a prisión.
Un año más, las estadísticas muestran la cruda realidad: las mujeres siguen siendo víctimas de una violencia que crece cada año. Los números representan su dolor, sufrimiento y miedo, que pueden transformarse en esperanza y vida gracias al trabajo de muchos hombres y mujeres que están contribuyendo a que estas cifras puedan disminuir y no volvamos a publicar ninguna estadística más.
