El Día de la Madre cuenta con orígenes ancestrales, que muestran cómo a la largo de la historia siempre ha sido venerada y valorada. Así fue en el Antiguo Egipto con Isis, que fue la “Gran diosa madre”, o en la antigua Grecia, que honraba a Rea, en la mitología, madre de los dioses del Olimpo.
Aunque la fecha de celebración puede variar según el país, siempre es en primavera. Aquí lo celebramos, el primer domingo del mes de mayo, a diferencia de EE.UU. donde se celebra el segundo domingo del mismo mes. El origen contemporáneo de la celebración se debe a la historia de Anna Jarvis (1864-1948) quien tuvo el deseo de que todas las personas honraran este día a sus madres. Anna, con su esfuerzo y lucha perseverante, consiguió que en 1914 el presidente Woodrow Wilson proclamara esta fecha como día festivo oficial en honor a las madres. A día de hoy es celebrado en 40 países.
Ann Reeves Jarvis fue la madre que inspiró el movimiento para reivindicar esta celebración. Fue una activista social, fundadora de los “Clubs de Trabajo del Día de la Madre” donde se compartían saberes sobre el cuidado de los hijos y las hijas ante la alta mortandad infantil en esos años. Fue la organizadora, después de la guerra, en 1868, del “Día de la Amistad a la Madre” dirigido a promover la unidad y reconciliación de familias de ambos bandos. También fue activa en su iglesia y la historia cuenta que fue durante una de sus lecciones de la escuela dominical en 1876 cuando su hija, entonces de 12 años, encontró su inspiración, cuando Ann cerró la lección con una oración, diciendo: “Espero y rezo porque alguien en algún momento, encuentre un día conmemorativo de la madre que la conmemore por el servicio inigualable que presta a la humanidad en todos los campos de la vida.”
Anna Jarvis luchó hasta los últimos días de su vida por defender el sentido de la celebración del Día de la Madre, a través de los mejores sentimientos como el amor y la gratitud. Motivó la difusión de programas bajo el nombre de “En honor a la mejor madre que jamás haya existido, la tuya”, inspirados por el amor, el cuidado y la influencia que brindan nuestras madres en nuestras vidas.
