Nuria Feliu, artista catalana universal y polifacética, principalmente conocida por su faceta de cantante y actriz, falleció ayer a los 80 años
Feliu nació en el barrio de Sants, hecho que siempre llevó con orgullo, hija de trabajadores, desde pequeña asumió responsabilidades como acompañar a su madre a vender en la parada que tenía en el Mercado de Sants. Su trayectoria profesional no le impidió estar siempre implicada en su barrio, tal y como recoge Pep Ribas cofundador de Centro Social de Sants decía “desde los clubs deportivos hasta los clubes de puntaires” estaba siempre con todas las personas. Núria Feliu siempre estuvo implicada en las asociaciones del barrio de Sants, pero también en todos aquellos encuentros que la llamaban alrededor de todo el país, como ella decía, siempre decía que sí. Y es que su pasión por disfrutar y divulgar la cultura catalana siempre será reconocida. Según sus propias palabras en una de sus últimas entrevistas, decía que tanta ilusión le hacía estar en un escenario pequeño como grande, porque lo importante era compartir con las personas.
Una de sus pasiones fue precisamente normalizar el uso del catalán como idioma en diferentes estilos musicales, como ella misma decía “se puede cantar en catalán cualquier tipo de canción”. Su trayectoria como artista fue galardonada por diferentes premios como la Creu de Sant Jordi. Más de 50 discos grabados quedan como archivo vivo y rico de su trayectoria, interpretando diferentes tipos de género, como jazz, boleros, sardanas, cuplés, canciones de películas, poesía, siempre en catalán. Su arte fue reconocido también internacionalmente, y como prueba sus inicios, donde ya realizó conciertos en todo el mundo, como al Waldorf de Astoria de Nueva York, festival de Knokke de Bélgica o en el Festival de Atenas entre otros países de Europa y Sudamérica principalmente.
Su voz es y será inconfundible, y allá donde esté su legado estará siempre presente.
