Existen múltiples evidencias científicas que hablan de la manera en la que las diferentes masculinidades pueden marcar tanto la vida de mujeres como hombres. En la sección NAM de este Diario se puede consultar por un lado qué es una Masculinidad Tradicional Dominante (MTD), qué es una Masculinidad Tradicional Oprimida (MTO) y cómo estos tipos de masculinidades van de la mano con la violencia de género; y, por otro lado, cuál es la alternativa igualitaria: una Nueva Masculinidad Alternativa (NAM, por sus siglas en inglés), posicionándose contra cualquier tipo de violencia y llevando por bandera la igualdad, el respeto y la libertad.

En la misma línea, el artículo Evidence of gender violence negative impact on health as a lever to change adolescents’ attitudes and preferences towards Dominant Traditional Masculinities, publicado en abierto en la revista científica “International Journal of Environmental Research and Public Health”, ahonda en la prevención que se puede llevar a cabo cuanto se trata de las relaciones tóxicas y el impacto que estas generan sobre la salud. Los resultados presentados pertenecen al proyecto “MEMO4LOVE. Social interactions and dialogs that transform memories and promote sexual-affective relationships free of violence from secondary education schools”. Basándose en toda la evidencia científica que demuestra los impactos negativos que las relaciones violentas pueden tener sobre la salud, las investigadoras proponen analizar dichas evidencias dialogando con grupos de estudiantes de tres escuelas y haciéndolo en base a textos científicos que detallan los efectos de las relaciones violentas en la vida de las personas. Para ello, se establecieron dos objetivos: por un lado, para que se pueda decidir sobre las relaciones afectivo-sexuales que se quieran tener y, por el otro, para poder transformar de forma preventiva las preferencias hacia las MTD del grupo estudiado alejándose de la violencia. Entre los resultados observados se puede concretar que aquellos niños no violentos ganaron confianza en ellos mismos y que las niñas empezaron a ver a estos chicos no violentos como atractivos.

Las más recientes evidencias sobre las masculinidades tradicionales ya observan que podría haber un impacto negativo sobre la salud en hombres no dominantes que tienen relaciones con mujeres que han salido de relaciones con hombres dominantes. De ahí la importancia de estudios y proyectos como el presentado, que ponen sobre aviso a los y las adolescentes y les aportan información y herramientas para que, quienes así lo deseen, decidan libremente alejarse de relaciones tóxicas con masculinidades tradicionales dominantes. Escoger una relación saludable podría marcar un antes y un después en sus vidas.