ACNUR, la agencia de la ONU para las personas refugiadas, ha anunciado que ha logrado acceder a los campos de personas refugiadas de Shimelba y Hitsats (Ethiopia). La última vez que accedieron fue en noviembre de 2020, ahora han podido entrar mientras se realizaba una misión conjunta en la zona con la oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas.
Los campamentos se han hallado completamente destruidos y las instalaciones humanitarias han sido saqueadas y navalizadas, según Relief. La mayoría de personas refugiadas, la oficina de ACNUR y la casa del personal que estaban en Hitsats estaban completamente calcinados. Las personas que conformaban la misión afirmaron, que las imágenes obtenidas a través del satélite y las experiencias narradas por las personas refugiadas, estos hallazgos habían iniciado a principios de este mismo año. Ahora, ACNUR está ahora preocupado por las personas que vivían en dichos campos, ya que han huido y necesitan urgentemente seguridad.
El equipo que realizó la misión también acudió a la ciudad Shiraro, ya que se piensa que las personas refugiadas están dispersas por la zona. Las organizaciones evaluaron la posibilidad de prestar asistencia y planificar la reubicación voluntaria.
Aproximadamente de las 20.000 personas refugiadas de estos dos campamentos, 7000 de ellas se han ido a campamentos a otros dos campamentos situados en Mai Aini y Adi Harush. Allí se les han proporcionado alimentación y suministros básicos. No obstante, no hay espacio suficiente. ACNUR y otras organizaciones están ampliando los servicios de protección a la infancia y de apoyo a las víctimas de violencia de género.
