Rebeca Andrade ganó el oro en gimnasia (suelo) el lunes pasado superando a Simone Biles que iba como favorita, convirtiéndose en la gimnasta latinoamericana más ganadora de todos los tiempos y en la mejor atleta olímpica de Brasil.
Podemos pensar que quien logra estos éxitos ha tenido todo de cara en la vida pero en este caso no ha sido así, Rebeca ha demostrado que en las dificultades también hay posibilidades cuando se une al esfuerzo y en el camino te encuentras con personas que creen en ti y te dan oportunidades.
Se inició en la gimnasia artística cuando tenía 6 años y vivía en Guarulhos, un municipio de Sao Paulo. Por aquel entonces, había un grupo de niñas y niños de un proyecto social de gimnasia que ya estaba prácticamente seleccionado y Rebeca no estaba en él; ella era hija de madre soltera, trabajadora doméstica. Su tía, que trabajaba como cocinera en el gimnasio, pidió a la profesora y entrenadora que echara un vistazo a su sobrina. Cuando la vió por primera vez y le pidió que saltara, ella misma recuerda que tuvo claro que tenía delante una nueva Daiane Dos Santos.
En aquel proyecto social de Guarulhos, donde Andrade acudía con su hermano mayor, uno de los 8 hijos de doña Rosa, su talento no tardó en destacar. En su historia de éxito destaca el apoyo de personas que ha tenido y tiene a su lado y tres factores principales destacados por sus entrenadores: fuerza y potencia física, equilibrio mental y carisma.
Si volvemos al lunes, cuando se colgó el metal más preciado, se vivió un momento muy emotivo entre las tres mujeres que subieron al podio, que quedará en las memorias (que hicieron historia por ser el primer podio conformado por mujeres negras en gimnasia masculina o femenina en los Juegos Olímpicos).
“Rebeca es una reina” dijo Biles (plata) y ella junto con Jordan Chiles (bronce), se inclinaron a modo de reconocimiento y solidaridad con su compañera Rebeca Andrade. No solo se logra el “título” de mejor atleta del mundo en las competiciones a base de puntos; también se logra demostrando ser la mejor compañera precisamente cuando alguien te supera.
