El cricket ha cambiado la vida de muchas chicas en Brasil al mejorar sus hábitos alimentarios, hábitos de estudio y sus amistades. Muchas chicas que han optado por el cricket no solo han dado a sus vidas una nueva dirección, sino que también les ha servido para dar un impulso al cricket en el país amante del fútbol y se han ganado el aplauso de Brasil a nivel mundial por sus avances en el deporte femenino.
La iniciativa ha ganado el reconocimiento en los Premios de Desarrollo Global de ICC en la categoría Iniciativa de Cricket 100% Cricket para Mujeres. El alcalde de Poços de Caldas, una ciudad a unos 150 km de Sao Paulo y la cuna del cricket en Brasil, comienza cada discurso con “Soy el alcalde de Poços de Caldas, la ciudad brasileña donde hay más niñas que juegan al cricket que al fútbol”.
Para las jugadoras, ser profesional implica recibir un pago mensual para seguir en el cricket. Entrenan cinco días a la semana de 13.00 a 17.30 horas en el centro de alto rendimiento y tienen sesiones de gimnasio cuatro días a la semana con entrenadores personales. En el centro, tienen acceso al personal médico y a personas expertas que las guiarán en su dieta y salud mental. Según el International Cricket Center, a partir de 2022 los contratos de un año también tienen una cláusula de embarazo.
Dependiendo de su edad, se espera que algunas asistan a la universidad local de educación física por la noche para obtener un título de cuatro años. Además, todas ellas están obligadas a ayudar con los programas de desarrollo comunitario, los mismos programas que las introdujeron en el cricket. La asociación quiere que sean modelos para seguir para la próxima generación de niñas y niños que se inicien en el deporte.
Coordinadora del Metoo University