Es sabido que los períodos largos, como las vacaciones, cuando las estancias en el hogar se dilatan más en el tiempo, son precisamente los momentos en los que aumentan los casos de violencia de género. El confinamiento sobrevenido con la pandemia, esencial para superarla, ya vaticinaba un aumento del sufrimiento por violencia en los hogares, tanto físico como psicológico, por parte de las mujeres, Reforzar la protección desde las instituciones se ha convertido en un desafío, tan ineludible como determinante, en estas circunstancias.
Es lo que se ha pretendido también en Andalucía. Durante 2020 se ha producido un aumento del 15% en el número de mujeres atendidas por el Instituto Andaluz de la Mujer respecto al año anterior, con una media diaria de 345 mujeres, lo que supondría 45 personas más apoyadas al día que en 2019, de acuerdo con ABC. En concreto, sobre violencia de género, se ha dado una media de 121 consultas diarias que, en comparación con el año anterior, han crecido un 17%, con 21 personas más de media cada día.
Entre las diversas medidas que se han puesto en marcha para ofrecer protección a estas mujeres víctimas de violencia en el periodo de confinamiento domiciliario, destacan la famosa campaña Mascarilla-19, desde las farmacias, o la llamada No la dejes sola, que apelaba a la actuación ciudadana ante el conocimiento de posibles casos de violencia hacia la mujer. Asimismo, y con mucho éxito, se ha reforzado el servicio de atención telefónica, para lo que se ha destinado un presupuesto de 1,3 millones de euros, diez veces mayor que en anteriores años. Así, la línea 900 200 999 se ha convertido en el servicio de referencia para la atención de más de treinta y ocho mil llamadas durante 2020, batiendo un récord histórico en el uso de este recurso, especialmente de abril a julio.
En situaciones de extrema urgencia, como el maltrato, y en momentos de mayor vulnerabilidad, como el distanciamiento social, resulta crucial que se activen todas las alertas, así como el despliegue de todos los recursos necesarios desde los distintos actores sociales, pero muy especialmente desde los organismos públicos. Actuaciones como las llevadas a cabo por esta institución y los resultados obtenidos ponen de manifiesto la importancia de seguir desarrollando y mejorando estrategias para una atención y protección efectiva de las víctimas de violencia de género.
Comparte esto:
- Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Telegram (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en WhatsApp (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Reddit (Se abre en una ventana nueva)
- Más