Cada vez más personas utilizan y acuden a las redes sociales para compartir información sobre temas relacionados con el mundo laboral, como por ejemplo, ofertas de trabajo. Este tipo de información a menudo se comparte y difunde a través del boca a boca, y existen numerosos estudios sobre cómo maximizar el número de personas que, a través de una red social, reciben información concreta. La manera en la que funciona este fenómeno, denominado maximización de la influencia social, es que un o una anunciante escoge un número limitado de personas (referidas como semillas) a las que hacen llegar la información directamente, para que estas la difundan y así se extienda la información a través de la red. Sin embargo, este método presenta problemas y limitaciones serios, ya que las personas que estén mejor conectadas en la red social tendrán más acceso a la información.
Minimizar esta brecha de acceso es uno de los objetivos del grupo de investigación de Microsoft FATE, liderado por un grupo de investigadores e investigadoras de diferentes disciplinas que trabaja para crear sistemas de Inteligencia Artificial (AI) más justos, éticos y transparentes. Para evitar brechas de acceso, tras numerosos intentos, concluyen que el maximin objective es más efectivo que otros intentos realizados. La solución pasaría por escoger un grupo pequeño de personas, de semillas, para maximizar la probabilidad mínima de cualquier persona que esté en la red de que le llegue la información. Para lograr esta difícil tarea, los y las investigadoras de FATE han probado diferentes algoritmos heurísticos para solucionar el problema usando datos reales. A pesar de lo simple que pueda parecer esta estrategia, descubrieron que era efectiva en la práctica.
Aunque aún queda mucha investigación en esta dirección para hacer que la información en las redes sociales le llegue al máximo número de personas, reduciendo las actuales disparidades, el equipo interdisciplinar de FATE está poniendo en debate y aportando evidencias sobre temas de gran relevancia en un mundo cada vez más conectado.
PhD de la Universidad de Wisconsin-Madison