La empresa Uber ha recibido recientemente denuncias de 550 mujeres por haber sufrido abuso sexual, maltrato, secuestro y violación por parte de los conductores. El caso ha sido presentado en el Tribunal Superior del Condado de San Francisco.
Además del número de denunciantes, la empresa publicó en junio de 2022 un informe de seguridad en el que destacaba que solo en 2020 hubo 998 incidentes de agresión sexual, entre ellos 141 informes de violación, y entre 2019 y 2020 recibió 3.824 reportes de diferentes categorías de agresión sexual.
La empresa, que ha asegurado que se toma en serio estas agresiones, ya ha ido implementando diferentes mecanismos para proporcionar la seguridad de los y las pasajeras. Por ejemplo, han implementado la verificación a través de un código que solo sabe la persona conductora para que el o la usuaria sepa que se está subiendo a un coche de la empresa. También tiene una función para informar de manera discreta ante cualquier problema de seguridad, e incluso de grabar en audio el trayecto. Sin embargo, según Business Insider, las demandantes han explicado que estas medidas no son suficientes. Escuchar a las víctimas es un paso necesario para hacer que la compañía sea más segura para todas y todos.
PhD de la Universidad de Wisconsin-Madison