The Dirty Dozen List es una campaña anual para señalar a las doce principales entidades por facilitar, consentir e incluso beneficiarse del abuso y la explotación sexual. Desde sus inicios en 2013, ha movilizado a miles de personas para exigir a las corporaciones, agencias gubernamentales y organizaciones que cambien sus políticas y prácticas de riesgo. Esta campaña del Centro Nacional contra la Explotación Sexual (NCOSE, por sus siglas en inglés) incluye un vídeo en el que interviene su vicepresidenta explicando que algunas entidades que conforman esta lista se utilizan cada día para enviar fotos, comprar regalos o escuchar música. Añade que a pesar de reconocer y apreciar los beneficios que nos aportan, productos de entretenimiento, servicios necesarios, es también importante que como personas usuarias, consumidoras, accionistas o inversoras, seamos conscientes de que también están permitiendo la violencia o incluso ejerciéndola con sus algoritmos y enfoques de captación de usuarios. En su gran mayoría, son mujeres, niñas y niños los objetivos del abuso y la explotación sexual, y mucho más si son de color o se identifican como LGBTQ.
Para seleccionar los componentes de la lista se sigue un procedimiento contactando con supervivientes y con quienes les han apoyado, que suelen ser sus padres, se hace un seguimiento de lo que están viendo y experimentando, se hace investigación y se recogen evidencias incluso haciéndose pasar por menores. También se mira qué compañías tienen altas cuotas de mercado, se rastrean temas como ‘agresión sexual’. No se trata de una top list donde unas son peores o mejores que otras, sino que se señalan esas doce compañías por diferentes razones. Son grandes gigantes tecnológicos que cuentan entre sus prácticas de riesgo el rechazo a analizar el sistema para detectar materiales de abuso sexual infantil, o negarse a aplicar medidas de seguridad predeterminadas para adolescentes; en otros casos, ofrecen una manera encubierta de pago para proxenetas, depredadores y pedófilos; proporcionan servicios a foros de prostitución o sitios con interacciones peligrosas relacionadas con grooming; legitiman a empresas que ejercen la explotación sexual como Pornhub, o utilizan inteligencia artificial para crear contenidos de abuso sexual infantil y falsos desnudos sin consentimiento.
En el sitio web de The Dirty Dozen List está toda la información recopilada de las doce corporaciones señaladas. Si se quiere apoyar la campaña para una entidad, hay que clicar en el botón Take Action Now y en 30 segundos se puede actuar. También se muestran historias de éxito e importantes avances que esta campaña ha logrado con grandes corporaciones como Google, Netflix, TikTok o el Departamento de Defensa de los Estados Unidos.
Podría parecer que estas instituciones son intocables pero hemos visto tanto progreso en la década en que The Dirty Dozen List ha estado activa, que la buena noticia es que juntos podemos transformar esta realidad, concluye Lina Nealon, vicepresidenta de NCOSE.
Comparte esto:
- Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Telegram (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en WhatsApp (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Reddit (Se abre en una ventana nueva)
- Más