Science Upstanders lideran la contranarrativa frente la desinformación sobre Mpox1b en redes sociales
El estudio “Mpox 1b: Upstanders for Science in Western and Chinese Social Media” publicado en *Masculinities & Social Change* analiza la difusión de información y desinformación sobre el brote de Mpox clade 1b en las redes sociales X (anteriormente Twitter) y Weibo. La investigación se centra en cómo se utilizan las evidencias científicas frente a los bulos en estas plataformas, destacando la importancia de la co-creación de estrategias de comunicación entre ciudadanos y autoridades sanitarias basadas en evidencias científicas.
El estudio identifica la presencia de activistas sociales en ambas redes sociales que promueven las evidencias científicas frente a los bulos y su impacto es crucial. Estas personas actúan como Upstanders for Science -defensores de la ciencia – y divulgan información basada en evidencias científicas además de debunkear bulos en ambas redes analizadas.
La investigación fue realizada por un equipo interdisciplinar de investigadoras/es de varias universidades, quienes analizaron un total de 3089 mensajes publicados entre el 12 y el 16 de agosto de 2024 en ambas redes sociales. Los resultados revelan una prevalencia significativa de bulos en X, donde el 44.2% de los mensajes contenían información falsa, en comparación con el 36.5% en Weibo. Sin embargo, se observó que en ambas plataformas, los mensajes que contenían evidencias científicas recibieron más interacciones que aquellos con bulos, lo que sugiere un interés mayor del público en la información científica, al contrario de lo que se suele escuchar en diferentes medios.
Uno de los hallazgos más preocupantes del estudio es la persistencia de bulos homofóbicos, heredados de la crisis del SIDA en los años 80, que culpan a la comunidad LGBTQ+ por el brote de Mpox1b. Este tipo de desinformación fue notable tanto en X como en Weibo, con un 23.9% y un 24.3% de mensajes homofóbicos, respectivamente. La investigación subraya la necesidad urgente de mejorar la comunicación científica para contrarrestar estos estigmas, especialmente en comunidades que ya enfrentan discriminación.
El equipo de investigación concluye que, para abordar eficazmente emergencias de salud pública como la actual, es esencial que las autoridades sanitarias colaboren estrechamente con las personas ciudadanas en la creación de estrategias de comunicación basadas en evidencias científicas. El estudio sugiere que esta cooperación puede ser la clave para superar la infodemia que acompaña a las crisis sanitarias y garantizar una respuesta más efectiva y equitativa ante futuras emergencias globales.