Las profesionales médicas del NHS afirman haber sufrido coacciones para mantener relaciones sexuales, revela una carta abierta de médicas veteranas y la BBC.
Cuatro mujeres dirigentes de colegios médicos de Gales han escrito una carta abierta que arroja luz sobre la presencia de la misoginia, la intimidación y el acoso sexual en el lugar de trabajo. Según sus testimonios, las funcionarias se han encontrado con proposiciones inoportunas de favores sexuales por parte de colegas masculinos mientras estaban de servicio.
El gobierno galés ha denunciado firmemente tales comportamientos, declarando: “El acoso y la violencia sexual son censurables y no tienen cabida en nuestro NHS”.
La Dra. Maria Atkins, presidenta del Real Colegio de Psiquiatras de Gales, reveló: “
A lo largo de los años, he tenido noticias de numerosas mujeres que, durante turnos nocturnos, se han enfrentado a insinuaciones de colegas masculinos y se han sentido presionadas para participar en actos sexuales. La negativa suele dar lugar a medidas punitivas. Esto puede ser especialmente perjudicial para las mujeres menos experimentadas o más jóvenes, ya que las disuade de colaborar en sus equipos y de seguir las especialidades médicas en las que aspiran a progresar.
Un análisis exhaustivo del personal del NHS ha desvelado que las cirujanas han sufrido acoso sexual, agresiones e incluso violaciones por parte de sus colegas en algunos casos. La carta abierta subraya que estos problemas no se limitan a campos médicos específicos como la cirugía o la anestesiología, sino que están generalizados en todo el sistema sanitario.
La Dra. Rowena Christmas, presidenta de la organización que representa a los médicos generalistas (GP) de Gales, señaló el desequilibrio de poder inherente a la presentación de denuncias contra personas que pueden influir en la propia carrera. Afirmó: “Como médico en formación o estudiante de medicina, es profesionalmente arriesgado expresar preocupaciones. En consecuencia, muchos guardan silencio y soportan una pesada carga de culpabilidad, sintiendo que se han defraudado a sí mismos y a sus colegas. Esto es especialmente difícil”.
La Dra. Christmas reconoció que los problemas persisten, revelando que eran frecuentes cuando ella empezó su carrera y no han desaparecido. Señaló: “Como socia de un médico generalista con 23 años de experiencia, puedo mantenerme firme y no tolerar este tipo de comportamientos. Ya no necesito referencias. Sin embargo, a los médicos en formación que temen denunciar los problemas no les falta resiliencia”.
A raíz de una polémica carta publicada en The Times por un anestesista jubilado de Swansea en la que sugería que se toleraba ese tipo de comportamiento, la junta sanitaria de Swansea Bay publicó una declaración en nombre de más de 70 miembros actuales del personal en la que rechazaba enérgicamente esas opiniones.
La carta abierta lleva las firmas de:
– Dra. Olwen Williams, Presidenta de la Academia Galesa de Reales Colegios Médicos
– Dra. Hilary Williams, Vicepresidenta para Gales, Real Colegio de Médicos
– Dra. Rowena Christmas, presidenta del Real Colegio de Médicos de Gales
– Dra. Maria Atkins, Presidenta, Real Colegio de Psiquiatras de Gales
También cuenta con el apoyo de numerosos médicas de alto nivel que representan a grupos profesionales médicos.
La Dra. Hilary Williams relató las insinuaciones sexuales generalizadas durante su formación, haciendo hincapié en la falta de un lenguaje apropiado para hablar de ello. Señaló que los médicos en formación de hoy confirman que sigue produciéndose en toda la medicina, con casos de médicos varones que cosifican a sus colegas basándose en sus atributos físicos o su atuendo. Además, las mujeres han declarado sentirse vulnerables cuando se encuentran a solas con un médico superior que hace comentarios sexualmente insinuantes o tiene un comportamiento amenazador.
La carta destaca cómo el modelo de rotación de los médicos en prácticas por distintos departamentos y consejos sanitarios puede permitir inadvertidamente que persistan conductas inapropiadas sin que se aborden. La Dra. Williams señaló que los becarios, empleados por la división educativa del NHS de Gales, carecen a menudo de los mecanismos necesarios para tratar con los agresores empleados por las juntas sanitarias. Expresó su preocupación por que los sistemas existentes puedan proteger inadvertidamente a los malhechores.
La Dra. Christmas recordó haber sido acosada por un colega superior, pero optó por soportarlo ya que sólo le quedaban ocho semanas antes de ser trasladada a otro lugar. Hizo hincapié en que tolerar ese comportamiento durante un periodo limitado significaba que los siguientes aprendices tenían que soportar un maltrato similar.
Los firmantes se han hecho eco de las peticiones de medidas inmediatas para mejorar las investigaciones sobre conductas sexuales inapropiadas en la atención sanitaria, incluido el proceso de denuncia. La carta afirma: “Los becarios y los colegas consultores recién titulados nos dicen que los sistemas de denuncia son débiles… el riesgo de dañar su carrera es demasiado grande para que muchos quieran denunciar”.
La carta también llama la atención sobre el desafortunado hecho de que algunas mujeres que ellas mismas han sido acosadas perpetúan esa crueldad, reforzando culturas tóxicas.
El gobierno galés expresó su acuerdo con la necesidad de condenar y abordar todos los actos de misoginia y mala conducta, instando al NHS a apoyar los procedimientos penales contra cualquiera que agreda al personal. Recientemente publicaron el marco Speaking up Safely Framework for NHS Wales, diseñado para reforzar los procedimientos y ofrecer garantías de que las preocupaciones se tomarán en serio, se escucharán con imparcialidad y no tendrán repercusiones personales.”
