Las autoridades declararon el martes que en la conflictiva región anglófona de Camerún, donde ha habido un conflicto continuo entre el Estado y los insurgentes, los separatistas han secuestrado a unas 30 mujeres que participaban en una protesta contra la violencia.
Los insurgentes, que libran una lucha contra las fuerzas gubernamentales para establecer un territorio anglófono en el oeste de Camerún, se enfrentan con frecuencia a acusaciones de atacar a civiles que se cree que están alineados con las autoridades del país predominantemente francófono.
Funcionarios locales informaron de que el sábado en el pueblo de Kedjom Keku, en la región del Noroeste, donde los grupos separatistas armados secuestran a menudo a civiles, principalmente para pedir rescate, “terroristas fuertemente armados” torturaron gravemente y secuestraron a más de 30 mujeres.
Un coronel anónimo del ejército informó el martes a la AFP de que unas 30 mujeres fueron secuestradas por los separatistas (el sábado por la mañana). Aún no las hemos encontrado.
A última hora del martes, el Ministerio de Administración Territorial confirmó a la AFP que “no había noticias de las rehenes”.
El día anterior, las ancianas habían organizado una marcha pacífica para protestar contra las “actividades criminales de los terroristas”, según las autoridades locales.
