El pasado 16 de noviembre se aprobó la ley Speak Out en Estados Unidos tras una votación bipartidista de 315-109 en la cámara de representantes. La ley aprobada previamente por unanimidad en el Senado en septiembre prohibe el uso de acuerdos de no divulgación previos a la disputa (NDA) en casos de acoso y agresión sexual en el lugar de trabajo.
La ley Speak Out garantiza que no se pueda impedir a las trabajadoras/es que revelen que han sufrido o han sido testigos de agresiones o acoso sexual en el lugar de trabajo, aunque hayan firmado un acuerdo de confidencialidad antes de que se produjera el abuso. Esta ley contribuye a superar a una de las barreras más habituales que se encontraban las personas que querían denunciar situaciones de acoso o de agresión sexual, el uso habitual de los acuerdos de no divulgación y otros mecanismos de silenciar para impedir que personas supervivientes y testigos revelen acosos o agresiones sexuales en el lugar del trabajo protegiendo así a los agresores.
Gretchen Carlson y Julie Roginsky, cofundadoras de la organización sin ánimo de lucro Lift Our Voices., han sido clave en la promoción de esta ley para garantizar unos espacios de trabajo más seguros, y una mayor protección tanto a supervivientes como testigos de agresiones o acoso sexual, extinguiendo el uso de los acuerdos de confidencialidad que sentenciaba a las víctimas a mantener el silencio.
