Blanca Catalán de Ocón, botánica vocacional, nació en Calatayud (Zaragoza) el 22 de agosto de 1860. Pasó su infancia en el valle del Cabriel, en el corazón de la sierra de Albarracín. En ese paraje se aficionó a la botánica, un mero entretenimiento que cada vez realizaba con mayor precisión.
Recolectaba plantas de la zona, las dibujaba con esmerado en un cuaderno, donde detallaba sus características con acertadas descripciones, su taxonomía y el lugar de colecta, confeccionando así un pequeño herbario con ejemplares apenas conocidos en su tiempo.
Resultó un trabajo crucial para el conocimiento y estudio de la flora ibérica. Descubrió una flor a la que bautizaron como Saxifraga Blanca en su honor, convirtiéndose así en la primera botánica española que tuvo su nombre en la nomenclatura científica universal. La primera española que dio su nombre a una flor
Con los años, su colección se reveló como un trabajo crucial para el conocimiento y estudio de la flora aragonesa.
Entre las plantas recolectadas, algunas resultaron ser nuevas especies, mientras que otras eran especies locales endógenas.
El primer trabajo que se le conoce salió publicado en el periódico La Provincia en 1880 (reproducido en Miscelánea Turolense, en 1984. con el título de Catálogo de las plantas colectadas por la Srta. Blanca Catalán de Ocón en Valldecabriel.
Se trata de un estudio que describe numerosas especies con sus respectivos nombres científicos, acerca del cual el naturalista Zapater escribió: «La Señorita Blanca Catalán de Ocón […] se ha distinguido recientemente recolectando plantas muy notables, que ha presentado al mundo científico admirablemente preparadas por su propia mano, y destinadas a enriquecer nuestra Flora Aragonesa».
Bernardo Zapater consiguió que el prestigioso botánico alemán Heinrich Moritz Willkomm notable estudioso de la flora española, tuviera conocimiento del trabajo de su trabajo.
Y gracias a él, el nombre de Blanca Catalán de Ocón y Gayolá figura junto al de los principales recolectores de plantas en el libro Prodomum de la Flora Española, una extensa obra con ilustraciones y descripciones botánicas publicada por el alemán entre 1861 y 1880.
El tratado incluye la lámina de una nueva especie a la que el científico, en honor a la botánica aragonesa, dio el nombre de Saxifrana blanca (también conocida hoy como Saxifraga granulata).
Por todo ello, es considerada la primera botánica española, y su nombre hoy figura en la nomenclatura científica universal.
Dentro de España, los trabajos de Blanca Catalán también fueron valorados en su tiempo, de hecho, el botánico Francisco Loscos Bernal la incluyó en el Tratado de plantas de Aragón.
