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Sabemos que las Nuevas Masculinidades Alternativas (NAM) son diversas en orientación sexual, y que lo que las define es su posicionamiento claro contra cualquier violencia, su seguridad y valentía que les aportan atractivo. En el día a día, las NAM tienen conversaciones muy diferentes y hoy queremos responder a la pregunta: ¿cómo hablan de las chicas los NAM?

Primero de todo, cabe decir que la socialización dominante lleva a muchas personas, independientemente de su sexo, edad u orientación sexual, a hablar de las chicas y las mujeres, a comentar sobre su aspecto o su atractivo. Por otro lado, es indudable que todas las personas nos fijamos en los y las demás.

A muchos chicos y hombres majos e igualitarios les cuesta hablar de las chicas y mujeres, sobre todo en espacios mixtos, porque pensamos que estamos siendo, o que nos van a llamar, machistas por hablar de una mujer. Pero la clave es cómo se habla de las mujeres, porque, si hablamos con belleza y elegimos valorar a las mujeres también igualitarias, el impacto de nuestras conversaciones puede ser muy transformador. 

Resulta muy útil, para saber cómo hablan los NAM de las mujeres, saber cómo lo hacen aquellos que siguen un modelo de Masculinidad Tradicional Dominante (MTD). Desde luego, aquí tenemos claro que estos chicos y hombres utilizan expresiones llenas de fealdad, vulgaridad, cosificando y aludiendo poco a valores y sentimientos. Pero es que hablan con este mismo estilo de quienes les atraen y de quienes no les atraen.

En contraposición, un NAM concibe que no hay belleza si no va acompañada de los mejores valores y sentimientos. Los NAM buscan la belleza más allá de los estereotipos y los cánones y buscan relaciones, del tipo y duración que sean, llenas de sentido. No se puede tener una relación bonita con alguien de quien hablas con desprecio o como una presa o un objeto.

Esta concepción del atractivo y la belleza se traduce en la forma en que los NAM hablan de las chicas y las mujeres, y no solo en la edad adulta, también hay chicos adolescentes que no se dejan llevar por un estilo despreciativo que no les va nada. De partida, nunca hablarán mal de ninguna, nunca hablarán cosificando el cuerpo de una mujer, tampoco entra en el juego y rechaza a quienes sí lo hacen. Pero además, y como decíamos al principio, las NAM tienen la capacidad de valorar y visibilizar personas que por el discurso dominante no son vistas como tan atractivas, al mismo tiempo que quitamos el foco de otras que sí lo son en la sociedad, pero que tienen actitudes no igualitarias. 

Podemos ser agentes de cambio en los modelos de atractivo. Y ofreciendo argumentos y razones que van mucho más allá del físico: “pues a mí me encanta que Marina nunca habla mal de nadie”; “me flipa que Lucía está pendiente de ayudar siempre que puede, ¿no te lo parece?”; “tiene las cosas claras, se le nota en la mirada, no se deja llevar, eso me gusta”. Podemos decir cómo para nosotros ver en las chicas gestos de solidaridad, bondad, respeto o amistad es lo que principalmente nos genera motivación y excitación. Cuando hablemos con un amigo o nos pida opinión, podemos hablar en todos estos términos que unen criterios claros con deseo, mostrando satisfacción y seguridad porque realmente pensamos y sentimos lo que decimos.

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