La situación de vulnerabilidad experimentada por las personas víctimas de trata con fines de explotación sexual se ha tornado profundamente dramática desde los inicios de la pandemia por COVID-19. Ya en abril de 2020 la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) propuso una serie de recomendaciones a los gobiernos de sus Estados miembro, orientadas a la lucha contra sus graves consecuencias sobre estas personas.
Coincidiendo en la fecha, desde el área de Igualdad de la Diputación de Granada se ideó y puso en marcha un Servicio de asesoramiento y apoyo psicológico, destinado a mujeres en situación de prostitución residentes en municipios de menos de 20000 habitantes en los que no se dispone de servicios públicos alternativos destinados a este fin. Esta iniciativa, emprendida a inicios de la pandemia, ha procurado, a lo largo de este año, asistir a uno de los colectivos en situación de mayor vulnerabilidad, cuya realidad se ha visto más encrudecida a consecuencia del confinamiento domiciliario y la crisis sanitaria.
Se trata de un servicio gratuito que se realiza a distancia, por personas colegiadas, y que ofrece la posibilidad de contactar desde internet, a través del correo electrónico psicoline@dipgra.es, o desde el teléfono, en horario 10.30-13.30h, al número 669534402, atendiendo en todo caso a las posibilidades de acceso de las mujeres demandantes.
Mercedes Garzón, diputada de Igualdad, Juventud y Administración Electrónica en Granada, apuntó en su lanzamiento a la gravedad de la situación de estas mujeres en extrema dificultad y “desamparo” cuya realidad se complica en tanto que “son mujeres sin redes sociales o familiares cercanas, en una situación que añade más estrés y ansiedad a la ya de por sí difícil situación que vivimos el resto de personas” y que por “la situación administrativa irregular (…) recelan de acercarse a determinados recursos sociales”, como queda publicado en la web de la Diputación.
De esta forma, desde este asesoramiento psicológico se ha procurado durante este tiempo ayudar a mejorar las condiciones de vida, de salud y sociales de estas mujeres en entornos donde el acceso a servicios sociales a veces se complica y en un momento en el que se requiere encontrar alternativas para seguir dando atención de calidad desde los recursos disponibles y más acertados para esta nueva normalidad.
Sabiendo el potencial de las redes de apoyo en la superación de situaciones dramáticas, iniciativas como la tomada por la Diputación de Granada se tornan ejemplares y referentes para avanzar en el bienestar y mejora de estas mujeres víctimas de explotación sexual, en este tan intenso como extenso camino que desde el feminismo se está recorriendo para el progreso en la erradicación y prevención de la trata de mujeres y la esclavitud sexual como fin último.
Comparte esto:
- Haz clic para compartir en Facebook (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en LinkedIn (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Twitter (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Telegram (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en WhatsApp (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para imprimir (Se abre en una ventana nueva)
- Haz clic para compartir en Reddit (Se abre en una ventana nueva)
- Más