Gertrude Blanch, brillante matemática


Esta matemática nació en 1897, en Polonia. Desde muy pequeña mostró una gran capacidad para las matemáticas, de manera que su padre le regaló un libro de problemas, que para ella fue muy importante. Se trasladó con su familia a los Estados Unidos, y allí cumplió su sueño de la infancia, dedicarse a las matemáticas. En 1932 se graduó en Matemáticas con la calificación de summa cum laude y pasó a ser miembro de la prestigiosa Sociedad Phi Beta Kappa, cuyo objetivo era la excelencia académica. Como las matemáticas eran su pasión, decidió hacer un doctorado.
En primer lugar, obtuvo un máster en Cornell, y después su doctorado en 1935. Realizó su tesis en el campo de la geometría algebraica; los resultados principales los publicó en julio de 1936 en un artículo de siete páginas en la prestigiosa revista American Journal of Mathematics.
En 1938 entró a formar parte del Proyecto de Tablas Matemáticas cuyo Comité de Planificación estaba integrado por el profesor de Física Lowan, por Milton Abramowitz y por Gertrude Blanch. Era su primer contacto con una rama fundamental de las matemáticas: el análisis numérico.
La matemática se convirtió en una persona imprescindible dentro del Proyecto de Tablas Matemáticas, ya que muchos ingenieros y físicos necesitaban complejos cálculos matemáticos y ella sabía cómo hacerlos.
Muchos años más tarde, Gertrude Blanco fue contratada como matemática profesional en el centro dependiente de la Fuerza Aérea estadounidense para desarrollar métodos numéricos para problemas de turbulencias, vuelos supersónicos, es decir, para aquellos problemas matemáticos que puede tener un laboratorio de investigación aeroespacial. En este período publicó artículos científicos en revistas de matemáticas y física de alta calidad.
En la parte científica se dedicó, sobre todo, al estudio de las funciones de Mathieu, que son solución de la ecuación diferencial del mismo nombre. Estas funciones tienen muchas aplicaciones en física e ingeniería y, por lo tanto, eran de interés para el resto de científicos.
Recibió el premio a la productividad de la Fuerza Aérea en 1958 y en 1962 fue la primera mujer en ser científico sénior del gobierno de los Estados Unidos.
Gertrude Blanch fue una matemática brillante que trabajó en los proyectos pioneros de su época y que fue reconocida por la comunidad científica.