Hace una semana la adolescente saudí, Rahaf Mohammed al-Qunun, huyó de su familia tras acusarla de abuso. La joven huyó hacia Tailandia rompiendo así con las estrictas normas de la sociedad de Arabia Saudí.
Fue el pasado viernes 11 de enero que al-Qunun salió de Bangkok e hizo escala en Seúl, en sur Corea, hasta llegar a Toronto, donde fue acogida. Su caso ha llamado especialmente la atención, pues no solo se atrincheró en una habitación de hotel en Bangkok para evitar ser enviada de nuevo a su familia en Arabia Saudí, sino que se le permitió ingresar en Tailandia y ser procesada como refugiada, rompiendo así con algunas barreras de su país como que la mujer no puede viajar sola sin el permiso de un tutor varón.
El presidente de Canadá, Justin Trudeau, afirmó que “Canadá es un país que entiende lo importante que es apoyar los derechos humanos, apoyar los derechos de las mujeres alrededor del mundo”, tal y cómo transmite de primera mano Euronews.
