Se calcula que más de 5,6 millones de personas han huido de Siria a países como Líbano, Turquía o Jordania para hallar nuevas oportunidades en entornos seguros y construir un nuevo proyecto de vida. De entre ellos, la mitad son niños y niñas que necesitan seguir ejerciendo su derecho a la educación. Pero no todos los niños y niñas encuentran todas las facilidades, aquellos/as con más dificultades son frecuentemente los y las que requieren atención especial durante su experiencia de aprendizaje.
A este respecto, euronews ha recogido varias iniciativas impulsadas por Jordania para poder atender sus necesidades. Por ejemplo, la organización Mercy Corps, con el apoyo económico de la Unión Europea, ha elaborado e implementado programas de educación inclusiva en distintas escuelas jordanas equipándolas con el material necesario para niños/as con diversidad funcional. Además, también facilitan maestros asistentes formados y nuevas tecnologías de carácter asistencial para facilitar el trabajo de los y las maestras.
En la misma línea la Unión Europea está incrementando el presupuesto de ayuda humanitaria en educación desde el inicio de la crisis siria. También, a partir del año que viene, cualquier proyecto educativo deberá considerar e incluir también las necesidades de personas que requieren atención especial. Por su lado, el gobierno jordano ha modificado y aprobado la ley sobre los derechos de las personas con discapacidad e implementará un nuevo plan estratégico 2018-2020 con el que se replicarán actuaciones e intervenciones que han resultado de éxito en el país.
Se estima que cerca de 15.000 niños y niñas sirios/as requieren de una atención específica y que tan solo el 3% está escolarizado. Las iniciativas impulsadas desde cualquier entidad favorecen la promoción de oportunidades de aprendizaje de calidad para todos y todas, con independencia de su procedencia o su situación socioeconómica.
