Una campaña en Inglaterra para prohibir que cualquier hombre pueda ver a su hijo concebido por una violación

Sammy Woodhouse fue víctima de abuso, tanto psicológico como sexual, cuando era menor de edad en Rotherham (Inglaterra). El caso fue muy conocido por entonces, en 2014, ya que se destapó que más de 1400 menores habían sido abusados y torturados durante 15 años. Una información que ya tenían las autoridades inglesas, pero ante la que no actuaron en consecuencia, lo que les convirtió en cómplices de dicha atrocidad.

Ahora un tribunal inglés ha permitido que uno de los violadores de Woodhouse, Arshid Hussain, visitar al hijo que tuvo la menor fruto de esa violación. Un acción que ha provocado estupor y rechazo en la sociedad británica.
Como consecuencia de este resultado Woodhouse continúa luchando para evitar este encuentros entre padres violadores e hijos fruto de ello. Por ello, Sammy ha iniciado una campaña en Change.org para cambiar la ley, concretamente quiere incluir una enmienda a la Ley de la Infancia de 1989 que prohibiría a cualquier hombre con un hijo concebido por violación solicitar el acceso / los derechos. Asimismo se está pidiendo que se realice una investigación pública para que todas las madres puedan compartir sus experiencias, con la finalidad de hacer mejoras a esta situación, ya que según Woodhouse es necesaria un asesoramiento y apoyo a las víctimas de violaciones y a las personas profesionales para asegurarse de que están trabajando dentro de la ley.