Purna Sen // Flickr

Hace unas semanas en este mismo diario, se publicaba una noticia sobre cómo la ONU lucha para combatir la explotación y los abusos sexuales dentro y fuera de la institución, y ahora desde otro enfoque, la coodinadora Ejecutiva de ONU mujeres, Purna Sen, en una entrevista para “Take Five” de UN Women, explica lo que se está haciendo desde esta organización para abordar el acoso sexual y otras formas de discriminación dentro de su propio lugar de trabajo, mejorando así el enfoque sobre este aspecto, tal como se hace en otros ámbitos.

Este compromiso quiere ir más allá de la ONU y conectar con la Universidad, los y las activistas, los empresarios y las empresarias, movimientos como el #MeToo y otras campañas similares. Comenta que se debe entablar un diálogo con cada uno de los agentes que actúan en la erradicación del acoso sexual sobre aquello que sí está dando resultados satisfactorios y, así, poder apoyar estos trabajos.

Purna Sen destaca la importancia que tiene desde ONU Mujeres, para que su tarea sea exitosa, construir un liderazgo y una cultura donde la tolerancia cero al acoso sexual sea una realidad vivida, así como que la voz de ONU Mujeres sea vista y escuchada en el movimiento global contra el acoso sexual, para que se les vea como cercanas y unidas a las mujeres que sufren acoso y no tienen los medios para informarse y luchar contra ello.

En esta entrevista, tras preguntarle sobre la situación de los movimientos actuales contra el acoso sexual, responde que estamos presenciando la movilización mundial más grande, profunda y amplia contra el acoso sexual jamás conocida. Señala como punto clave la respuesta que los medios de comunicación dan al tratamiento de la violencia sexual como noticia, pues en este aspecto advierte del cambio real que ha habido recientemente, ya que algunas partes de los medios han escuchado a las mujeres con respeto, han tomado sus voces y sus experiencias y han realizado un serio esfuerzo periodístico para encontrar hechos e informar sobre sus investigaciones. No sensacionalizaban, trivializaban o minimizaban lo que escuchaban de las mujeres.

Por último, Purna Sen, indica que para cambiar la cultura de tolerancia del acoso sexual, necesitamos un liderazgo inequívoco. Los gerentes y los líderes deben priorizar el abordaje del acoso sexual, cambiar las prácticas y políticas de recursos humanos en los lugares de trabajo para que apoyen siempre a la persona que denuncia, y no se ponga en duda a las mujeres que se atreven a hacer pública una situación de acoso en un espacio laboral o público, pues de esta forma los avances serán sostenibles y no se revertirán en unos años.

Sabemos que cuando se da el acoso sexual de forma reiterativa es porque hay una cultura de la tolerancia que protege a los acosadores y permite que este acoso se siga produciendo. El cambio se está dando y es imparable, la cultura de tolerancia cero está llegando a través de líderes, empresari@s, compañer@s…y con ello el fin de la impunidad que tenían hasta ahora los acosadores dando un giro necesario para acabar con el acoso sexual.

Es posible acabar con esta cultura de la tolerancia, y  un paso importante es este liderazgo que tanto individual como colectivamente podemos llevarlo a término en nuestros puestos de trabajo, rechazando abiertamente los comportamientos de acoso sexual y apoyando siempre a las víctimas.

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